- Se podría ver del punto de vista de que mi historia comenzó hace 15 años y fracción, en 1995. En ese caso, pasaría a relatar una historia un poco mas aburrida y tediosa, mi vida desde pequeño, desde antes de empezar a caminar sin siquiera tener una pizca de idea sobre lo que me esperaba allá afuera, en el mundo real, porque toda mi infancia fue dentro de una pequeñísima burbuja, donde no existían las preocupaciones, el estrés, e incluso, donde tampoco existían los verdaderos amigos ya que todos éramos pequeños y por lo tanto, iguales. Nadie se preocupaba por el otro, excepto cuando uno tenía un nuevo juguete de un color llamativo como el rojo, ya que desde pequeño me metieron la idea de que algunos colores como el café y el negro no van bien con el ánimo de un niño pequeño y “feliz”, razón por la cual siempre tuve una tendencia por los colores brillantes y resaltantes.
Relataría también los hechos que marcaron de cierta forma mi vida, ya sea de una forma positiva o negativa. Algunos de estos hechos podrían ser mi primer día de jardín infantil, o de colegio. Donde esta burbuja de la cual ya hablé, como por un acto de magia, aumenta su tamaño inmensamente. En este momento comencé a socializar con mi entorno, a relacionarme más con los demás niños del jardín, a conversar sobre lo que haríamos cuando llegásemos a ser presidentes y viajásemos a la luna, a disfrutar aún más de la vida, a amar el jardín por el simple hecho de ver a mis queridos amigos con los que pase tantos buenos ratos tales como esos hermosos y divertidos paseos en la luna dentro de una caja de cartón o en una mínima nave espacial de juguete. Recordar momentos como esos, me hacen preguntarme si uno se va volviendo más amargado por culpa de la misma realidad, o va perdiendo la imaginación a medida que crece. Espero que sea la segunda, porque sería una pena que se valla perdiendo la felicidad por cosas insignificantes como la muerte de un familiar querido o el adiós de un amor tristemente olvidado justo cuando el camino de la felicidad está delante de nuestros ojos esperando por ser disfrutado o una de las cientos de injusticias que hay en este mundo y que nadie hace nada para resolverlas.
Luego, el colegio...donde esta burbuja crece un poco más pero que al ser mi colegio privado y uno de los más cerrados al exterior, esta burbuja no logra crecer demasiado si es que uno no se esfuerza mucho por ello... esto no es solo opinión mía, podrían preguntarle a cualquier persona de mi colegio y les responderían lo mismo que les estoy diciendo. Bueno, conocí gente nueva.. gente impresionante, a mis mejores amigos, a mis enemigos (ya no son enemigos, solo nos peliábamos por estupideces que se arreglaban a los 5 minutos.. ahora no tengo ningún enemigo por suerte), a los profesores... en verdad.. esta etapa me gustó bastante.. mucha gente nueva, con la que poder divertirme realmente ya que mi vieja nunca me pescó mucho y aqui tenía gente que yo de verdad sentía que se preocupaban por mí...
Ahora, explicaré el punto de vista de mi historia hace 4 años:
- Me atrevo a decir que mi historia comenzó hace tan solo 4 años. Pero… ¿Cómo me atrevo a decir tal barbaridad sobre mi propia historia? Obviamente, son 4 años desde el punto de vista psicológico. Explicaré mi pensamiento. Pienso que mi historia no comienza solo cuando nací, sino cuando logré la capacidad de ir moldeando mi propia historia por el camino que yo quería y sigo aún queriendo. Todo comenzó con un gran cambio de pensamiento, comencé a preocuparme un poco más de mis estudios, ya que muy dentro de mí, de verdad sentía que si me lo proponía, lograría grandes hallazgos. Y así fue, comencé a estudiar y a poner un poco más de atención en clases, tenía tal potencial que sin un gran esfuerzo, subí de un promedio 5.7, considerado mediocre enmi colegio, a un promedio 6.3, considerado un promedio RELATIVAMENTE bueno, y sin mayor esfuerzo, de hecho, diría que cada vez esforzándome menos, fui subiendo cada vez más mi promedio. Esto me otorgó una gran felicidad interna, me sentía mucho más maduro que otros e inteligente, cosa que en su momento se sentía bastante bien. Pero fue aproximadamente en estos años, cuando excedí mi “límite de esfuerzo” y entré en un gran estrés. Fue en esos años cuando no podía soportar ni una sola mirada con algún gesto de desprecio o de insulto, razón por la cual tuve un lapso bastante agresivo en mi vida, período que no me gusta recordar, ya que perdí algunos amigos por culpa de dicha agresividad. Fue en ese año cuando, a causa de ese gran estrés que tuve, me fui sumergiendo más y más en la música, que al parecer, era la única que me comprendía y además porque mi hermana mayor también gustaba mucho de la música, razón por la cual quedé con sus gustos por algunos estilos de música tales como los de los grupos Inti-Illimani e Illapu. Pero aún me sigo preguntando si es que yo escuchaba esos grupos buscando alguna forma de acercarme a mi hermana que siempre fue como mi verdadera madre, quien por razones de ideas y trabajo se había ido a vivir al norte. O de acercarme a mi papá, que también escuchaba ese tipo de música y que en mi infancia, por razones de trabajo y por intentar sacar la familia adelante, llegaba alrededor de las 1 o 2 de la mañana y salía a las 7:30 de la mañana, por lo que mi contacto con el era mínimo si es que no nulo. Hoy me gustaría agradecer a mi papá y en especial, a mi hermana, por haberme inculcado este gusto que tengo por la música, por haberme ayudado a madurar y porque ellos estaban allí para ayudarme incluso cuando yo me enojaba por tenerlos encima todo el día, pero después de un rato cedía y aceptaba su ayuda, ya que en el fondo, lo único que yo quería era que me regalonearan y me enseñaran sobre la vida.
En primero medio logré, con mis ahorros, comprarme uno de mis instrumentos favoritos, un bajo eléctrico. El hecho de que lo haya comprado con mis propios ahorros le da otro sabor al cuento, yo creo que no me gustaría tanto como me gusta si es que mis papás me lo hubiesen comprado. El bajo fue y es uno de los mejores medio que usé y uso para irme a mi propio mundo y para bajarle el estrés a la vida acelerada de la ciudad... wea que odio.. apenas pueda me voy de santiago a vivir al sur. El otro medio que descubrí para librarme del estrés que tanto mal me provocó una vez fue la escritura. Comencé a escribir hace dos años, con un poema para un amor que desgraciadamente fue no correspondido. Desde ese poema, no me ha llegado la inspiración suficiente como para escribir otro. Después de esa desgracia, me dediqué a escribir reflexiones y frases sobre mi vida, la gente que me rodea y sobre la sociedad.
Ahora, ya entrando a tercero medio, sigo amando la escritura, la música, a mis mejores amigos, quienes estuvieron siempre conmigo para compartir una pena, para aconsejarnos entre nosotros, para conversar.. de verdad.. no se donde estaría sin mis verdaderos amigos, no sabría en quien poder apoyarme cuando necesito ayuda ni con quien reírme un rato sobre las estupideces de la vida o conversar de toda la mierda que últimamente esta pasando en Chile.
En general, pienso que he tenido una buena vida, que he tenido experiencias buenas y malas, amores y desamores. Pero incluso, si es que yo hubiese tenido más experiencias malas que buenas, mi mirada de la vida seguiría siendo igual de buena que la que llevo hasta ahora, pues ¿que sería de la vida si es que fuese tan fácil?, no tendría gracia, no son mas que obstáculos que cuando uno se atreve a desafiarlos, y los sobrepasa dejan abierto un gran camino, con cientos de opciones y oportunidades. Es por eso, que aunque la mayor cantidad de cambios la haya sufrido en el lapso de hace 4 años, todo, es decir, todo lo que yo he vivido conforma parte de mi historia, una historia única, diferente a todas las demás ya que cada uno vive su propia vida, con sus propias experiencias y moralejas, de la forma que quiere y con quien quiere.